A partir de este lunes estará prohibido fumar en diversos espacios públicos como playas y restaurantes, por lo que ya toda la gente se está preparando en Playa del Carmen. Los empresarios hablaron de lo que implica este cambio en la ley que ya existía con anterioridad.
“Sufre una modificación, no es algo nuevo, es algo que ya teníamos, las restricciones de fumar donde hay techo, hay paredes, que antes solo se podía fumar donde estabas al aire libre; han modificado, han emitido un decreto, han modificado el reglamento y se ha puesto un poco más exigente”, señaló en rueda de prensa Gerardo Valadés Victorio, presidente de Canirac Playa del Carmen.
“Es importante avisarle a la gente que a partir del lunes no se puede fumar en ninguna parte del restaurante”, sentenció el empresario.
Puso como ejemplo que en el restaurante en el que se llevaba a cabo la rueda de prensa hasta estos momentos ya no se podía fumar en el 70 u 80 por ciento del establecimiento, pero a partir del lunes ya no se podrá en ninguna parte. Y así será en todos lados, puesto que esta es una ley que se aplicará a nivel nacional.
Para poder fumar en un restaurante habría que tener un espacio específico a unos metros del restaurante y donde nadie puede estar consumiendo nada. Por lo que se hace muy difícil que los comensales puedan fumar en los restaurantes de Playa del Carmen.
“Nosotros no nos dedicamos a vender áreas de fumar, a vender cigarros; el 80 por ciento de los restaurantes se dedican a vender comida y se complementa con un vino, algo para tomar”, detalló Valadés. Y dijo que dependerá de cómo sean los restaurantes (abiertos o cerrados) para que haya posibilidades de que la gente pueda fumar.
Sobre si esta prohibición podría generar afectaciones, sobre todo económicas, es decir, que baje el número de comensales, el dirigente de Canirac consideró que no sería muy distinto a lo que ocurre ahora, que cuando la gente quiere fumar se le explica que no puede hacerlo en el restaurante y sale a la calle a echarse un cigarro. Sería más o menos lo mismo a partir del lunes.
Y es que ahora las áreas para fumar ya no pueden estar cerca de la entrada del restaurante, de los baños, de las oficinas, de la entrada del personal. Por lo que prácticamente se hace imposible el poder fumar.
Por ello los restauranteros esperan que la gente entienda lo que implica esta ley, y porque quienes se resistan o no cumplan con la ley podrían hacerse acreedores a 36 horas de cárcel, entre otras sanciones. Pero reiteró, al menos en el destino no sería muy diferente a lo que se hace hasta ahora.
En otro tema, y al hablar de que la inflación es alta, a pesar de ella los restauranteros de Playa del Carmen confían en que este 2023 sea un buen año para el sector.
