La violencia no cesa. Se ha reportado una nueva agresión de taxistas contra un vehículo de Uber, el cual era conducido por una socia conductora. Arrojaron tabiques con los cuales le rompieron los cristales.
“La primera vez (nos dijeron) que se había cerrado y luego que una agresión; entonces lo único (que sabemos) es que no es nadie cercano a nosotros; sabemos que sí agredieron a una mujer, a una conductora de Uber; se hizo la rebambaramba; al parecer fue un enfrentamiento se supone entre taxistas y conductores de Uber; es lo que suponemos”, señaló en entrevista Águeda Esperilla Soto, vocera de los socios conductores.
Y es que de acuerdo con lo dicho por la socia conductora, se dijo que se había realizado un bloqueo sobre la carretera 307 a la altura del hotel Royalton Riviera Cancún. Sin embargo, todo se debió al parecer por este zafarrancho provocado por taxistas, quienes una vez más le rompieron los vidrios a un vehículo.

Si bien no tienen certeza de lo que realmente ocurrió, dicen que los taxistas de los sitios del Royalton y el Dreams son peligrosos.
“Lo que suponemos es que agredieron a esta chava, llegaron tal vez algunos compañeros a apoyarla y se armó el relajo. De por sí los sitios del Royalton y el Dreams Natura, que están ahí en la Riviera, son sitios súper peligrosos, de verdad, ahí son unos viles delincuentes los taxistas; los hoteleros lo permiten”, denunció Esperilla Soto.
ZONA PELIGROSA
Por ello, los socios conductores de Uber no acuden a estos hoteles porque es peligroso para ellos, pero posiblemente, quien acudió a la zona y resultó agredida no sabía de la situación.
“Nosotros ya decidimos que cuando nos lleguen servicios de ahí, explicarles a los huéspedes, por qué razón no lo brindamos, porque son unos delincuentes ahí. Los hoteleros no hacen absolutamente nada y porque estamos expuestos tanto ellos como nosotros. Ese es el protocolo que tenemos para el Royalton”, detalló.

Lamentó que ocurra una nueva agresión porque las autoridades no han sancionado severamente a los taxistas.
“El tema vuelve a ser el mismo, todo esto pasa porque la autoridad no hace absolutamente nada; de ese sitio ya hay muchas denuncias, de gente armada, de amenazas, de muchas cosas que han hecho ellos. Y la autoridad, nada”, subrayó.
Cabe resaltar que habrían sido ladrillos los que arrojaron taxistas de Cancún al auto de Uber, al que le rompieron los cristales. Al sitio llegaron otros socios conductores, compañías de seguros y hasta la Policía. Eso afectó durante un tiempo el tráfico y por eso se pensó que había un bloqueo. Las personas involucradas fueron llevadas ante el juez para el deslinde de responsabilidades. No se sabe si se va a interponer denuncia por este nuevo incidente.