Cancún.- Muchos hoteles en el estado fueron edificados en donde no debían, gracias a la corrupción, lo que los pone en riesgo ante la llegada de un huracán categoría 5, indicó Jorge Herrera, especialista del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav).
En entrevista, el especialista advirtió que en caso de Isla Blanca, es un riesgo construir, ya que su barrera de arena es muy frágil y con el paso del tiempo terminará por erosionarse.
“Es una isla con una barrera muy frágil, sus pilotes están sobre arena y cuando se erosione se desestabilizará. Está en alto riesgo ese sistema y las inversiones”, expresó.
Reiteró que no es buena idea construir en Isla Blanca, como tampoco lo fue construir en la Riviera Maya y resaltó que esto se debe a la corrupción para el cambio de uso de suelo en el estado.
“Todavía vemos que se está construyendo sobre manglares, los permisos no los da el municipio, los da la federación”, dijo.
Indicó que hay una desconexión entre la federación y el municipio, ya que el permiso por el uso de suelo lo da el municipio.
En este sentido, manifestó que todos los hoteles cuentan con un departamento de ecología y biólogos, por lo tanto sabe que tienen que cumplir con ciertas normas, pero prefieren incurrir en actos de corrupción.
Comentó que es necesario dejar de masificar la oferta turística y por el contrario elevar los costos para que sea un turismo más exclusivo el que llegue y “que pague más” para reducir los daños ambientales.
Citó como ejemplo la isla de Holbox, a donde la gente está dejando visitar el lugar debido a su carencia de drenaje, luz, agua, lo que ocasionó que los precios se fueran para abajo.
PASTOS MARINOS
En otro tema, el investigador expresó que los hoteles han quitado sus pastos marinos, lo que provoca que se erosión en las playas, ya que tienen una relación directa.
“Si quieren vender playa, tiene que haber playa y los pastos marinos son muy importantes”, indicó.
Manifestó que los visitantes prefieren ver los peces de colores, los cuales se reclutan en los pastos marinos, ya que muchos no conocen los corales.
Advirtió que ante la falta de pastos marinos, se generan problema de erosión y calidad del agua, por lo que tienen que llevar más lejos a los turistas, lo que representa más gasto en gasolina para los operadores de lanchas.
Aclaró que la ausencia de pastos marinos no tiene que ver con la presencia del sargazo, el cual viene del Atlántico, pero sí repercute en la calidad del agua, donde hay una “florecimiento sargal nocivo”.
“Tampoco nos extrañemos, porque hay una carga de aguas residuales, no hay sistemas de tratamiento eficientes”, comentó.