Cancún. – La rectoría de la Universidad Intercultural Maya de Quintana Roo todavía es un “botín político “, lamentó Ismael Gómez Tox, presidente del patronato de esta institución.
En entrevista, el también activista señaló que el nombramiento de William Briceño Guzmán como nuevo rector fue un “pacto político”; un acuerdo logrado mediante consenso.
Se mencionó que existen “raíces políticas” en su elección para ocupar este importante puesto, aseveró él.
La prioridad a criterios políticos y el pago de favores, por encima de aptitudes académicas y administrativas, hace que se nombre a rectores como Rafael Pantoja Sánchez, el antecesor de actual, quien dejó la universidad “con una serie de convenios suscritos con proveedores, llevándose consigo importantes acuerdos”.
El ahora exrector no tenía conocimientos del idioma Maya, por lo que no se identificaba con la esencia de la universidad, que busca preservar y promover la cultura y la identidad Maya, aseveró Gómez Tox.