Colectivas feministas de Quintana Roo se han manifestado a favor de la iniciativa legislativa “Niñas, no madres”, por medio de la cual los diputados de la Decimoséptima Legislatura del Congreso del Estado quieren exhortar a médicos y profesionales de la salud para que garanticen a niñas y menores la información y el acceso a métodos anticonceptivos.
En este caso de trata de la Organización de la Sociedad Civil (OSC), Gobernanza MX, la cual reconoce la iniciativa presentada ante el Congreso de Quintana Roo, para que el personal médico y de Salud garantice el derecho de las niñas y adolescentes a recibir atención, orientación e información precisa y verídica sobre planificación familiar y el acceso gratuito a los métodos anticonceptivos.

Lo que se busca es prevenir los embarazos adolescentes en Quintana Roo, parte de los cuales ocurren por falta de información o acceso a métodos anticonceptivos.
La iniciativa “Niñas, no madres”, presentada en el Congreso del Estado, propone además que el personal de Salud extienda a las adolescentes embarazadas certificados médicos que justifiquen las ausencias por embarazo y maternidad, con validez ante las instituciones educativas.
Y a su vez, piden a los planteles educativos que establezcan un plan de permanencia y continuidad escolar, a fin de reducir el abandono escolar por causa de los embarazos en adolescentes.
SE REPRODUCE LA DESIGUALDAD
Al presentar la iniciativa el pasado 17 de octubre, la diputada Mildred Ávila explicó que el embarazo precoz o adolescente es una forma de reproducción de la desigualdad y de la pobreza, que afecta particularmente a las menores de edad de las comunidades en mayor situación de precariedad. Por ello es importante prevenirlo.
Dentro de los factores sociales que influyen en el embarazo adolescente están la educación, la discriminación, el matrimonio infantil, el abuso sexual, las carencias sociales, la dificultad para acceder a métodos anticonceptivos, las creencias religiosas y las costumbres culturales.
Gobernanza MX coincide en que el embarazo adolescente tiene una estrecha relación con el estatus socioeconómico, pues se ha comprobado que adolescentes que provienen de familias con mayores posibilidades económicas tienen acceso a una mejor educación, así como información y acceso a métodos anticonceptivos o en su caso, procedimientos de aborto.
Según investigaciones de la UNAM, de todas las personas que iniciaron su vida sexual, el 97 por ciento conocía al menos un método anticonceptivo; sin embargo, más de la mitad no utilizó ninguno en su primera relación sexual. En consecuencia, ocurren al año 340 mil nacimientos en mujeres menores de 19 años en México. De ahí la importancia de prevenir el embarazo adolescente.
Por ello, las activistas consideran primordial darles opciones a las menores y no imponerles un embarazo, el cual de paso les limitará sus opciones a futuro, sobre todo si no cuentan con una red de apoyo que les asista. Y también se les reducen las opciones a los hijos de estas menores y aumentan las condiciones adversas.