Cancún.- Debido a la poca afluencia de personas que se registran actualmente en los dos únicos módulos de vacunación habilitados en Cancún, el Hospital General y el domo Jacinto Canek, negocios aledaños han comenzado a presentar una disminución considerable en sus ventas.
Dueños de estos establecimientos, que son por lo regular de abarrotes y papelerías, destacan que sobre todo en lo que va de abril, sus ventas se han ido “a pique”, pues ya no tienen a quién sacarles copias, impresiones u otros servicios que generaban las jornadas de vacunación.
Esta situación, que se debe tal vez a que gran parte de la población ya cuenta con su esquema de vacunación completo, genera también molestias en los vecinos de estas zonas, quienes ya ven innecesaria la medida de cerrar las vialidades cercanas a estos módulos.
Alegan que, debido a que la afluencia es casi nula, el municipio debe liberar ya la circulación, pues algunas son importantes para el tránsito, como lo es el tramo del Arco Vial, que corresponde al Hospital General, y la avenida Chichén Itzá, a la altura del Jacinto Canek.