Con la finalidad de seguir ayudando a los niños con cáncer de Quintana Roo, la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer (AMANC) recibió el donativo de media tonelada de tapitas, las cuales les permiten obtener recursos que sirven para los tratamientos de los menores.
En entrevista, la representante de AMANC, Frida Schulz Rodríguez, dijo que cada vez reciben más llamadas de niños y familias que piden ayuda. Y que eso puede deberse a dos situaciones: una es que hay más niños con cáncer, y la otra es que la gente ya sabe a dónde acudir en busca de apoyo.
Habló además de la labor de la fundación y del acompañamiento integral que hacen con los menores enfermos.
“Las necesidades de los niños son económicas, institucionales. La fundación hace un acompañamiento integral. Desde que el niño llega a la fundación, es parte de nosotros como beneficiario que ayuda en todo lo que necesitan el niño y la familia. Ya sea transporte, medicinas, ropa, comida, transporte para sus operaciones, es acompañamiento integral. El niño puede vivir en la fundación”, comentó.
Resaltó que la fundación es una casa con habitaciones donde los niños pueden estar ahí el tiempo que lo necesiten, desde que se les detecta la enfermedad hasta que se quitan todas sus quimios.
TODO DONATIVO AYUDA A LA CAUSA
Agradeció el donativo de media tonelada de tapitas, gracias a lo que tendrán más recursos para apoyar a los niños con cáncer.
“Una tapita es significativa, el dinero no es una cantidad exorbitante, sin embargo sí es constante. Entonces todo lo que nos donan claro que nos sirve. Cada kilo de tapitas que recibimos son 3 pesos con 50 centavos, entonces ahorita es media tonelada que nos sirve y entra a la fundación para lo que se vaya necesitando con los niños y las mamás”, señaló.
Detalló cuál es el número de niños con los que trabajan al día de hoy, y dónde se ubican.
“Nosotros ahorita tenemos 153 niños que están en la fundación registrados como beneficiarios. Y son 62 niños que están en Playa del Carmen, Cancún, Puerto Morelos, y los que faltan están en Chetumal. De manera indirecta ayudamos a los niños de Chetumal, con lo mismo que a los niños de Cancún nada más que en Chetumal”, subrayó.
La atención integral a los menores implica que se trabaje con psicólogos, nutriólogos y otros especialistas. Para ello es que AMANC siempre requiere recursos.
“Lo más importante del cáncer infantil es que antes de que se vea, sea detectado. Lo que pasa es que no sabemos ni los síntomas y cuando el niño llega ya tiene una situación complicada. Si los síntomas son detectados a tiempo, hay un 80 a 90 por ciento de probabilidad de que el niño se pueda curar. Por eso nos abocamos mucho a que las personas conozcan los síntomas”, puntualizó Frida Schulz.
Estos síntomas son cansancio crónico, que no es típico para un niño; aparición de puntos rojos en la piel; fiebre que va y viene de la nada; dolor e inflamación de estómago de manera anormal, y aparición de manchas blancas en los ojos.
No significa que siempre sea cáncer, pero es importante que los menores con estos síntomas sean revisados por un médico, finalizó Schulz.