Luego del lamentable caso en el que 23 perros fueron localizados sin vida en un domicilio de Cancún, 15 de ellos en estado de putrefacción, las autoridades del Ayuntamiento de Benito Juárez han confirmado que el supuesto refugio animal no contaba con registro.
Asimismo, el municipio está colaborando de cerca con la Fiscalía General del Estado (FGE) de Quintana Roo a fin de poder dar con los responsables de tener en estas condiciones deplorables a estos animales, de los que al menos cinco pudieron ser rescatados aún con vida.
De acuerdo con los funcionarios municipales, fue este domingo que las Direcciones de Ecología y Bienestar Animal recibieron una denuncia. Vecinos del Fraccionamiento Alejandría de Cancún, de la Región 214, alertaban de un domicilio en el que se escuchaba a muchos animales y del que despedían olores fétidos.
Los residentes de dicha vivienda se hacían llamar protectores de animales, pero no contaban con permisos ni registro. E incluso, de acuerdo con lo observado por las autoridades en la inspección, la situación era muy extraña. Incluso hay quien pensó que podría estar relacionado con brujería.
La propia alcaldesa Ana Patricia Peralta de la Peña se ha puesto en contacto de manera directa con el fiscal Raciel López Salazar, a fin de darle celeridad a las investigaciones y colaborar en lo que sea posible a fin de dar con los responsables de este caso de maltrato animal en Cancún.
Fue el sábado cuando se interpuso la denuncia y este domingo cuando Ayuntamiento y Fiscalía de Quintana Roo ingresaron al domicilio y hallaron a los 23 perritos sin vida, algunos ya en descomposición y a los cinco que afortunadamente sí pudieron rescatar y que por el momento están siendo atendidos y bajo resguardo.
Este supuesto refugio animal de la 214 de Cancún, reiteraron los funcionarios del Ayuntamiento, era clandestino. No se tenía conocimiento del mismo, no había registro. Jamás se le había hecho una inspección pues se ignoraba su existencia.