Desde que se inauguró el Centro de Recursos para Trabajadores Migrantes en Cancún, se han reportado cuatro casos de explotación laboral hacia extranjeros.
De acuerdo con Alicia Ramírez, directora de esta institución, desde que se abrió el centro hace un año, dos empresas han cometido actos de explotación laboral. Según reveló dichas compañías no pagaban lo estipulado y hacían que los trabajadores doblaran turnos de más de 24 horas.
No obstante, estos casos fueron canalizados al área correspondiente para resolver la situación a través de un abogado laboral y un abogado migratorio.
“Desconozco las empresas responsables, pero se llevaron los casos ante un abogado laboral y un abogado migratorio y se llevaron los casos ante las juntas de conciliación”, comentó en entrevista la funcionaria.
Cabe destacar que, en el Centro de Recursos para Trabajadores Migrantes se llevan a cabo diferentes trámites, como la regulación del estatus migratorio, solicitudes de refugio, entre otros. Pero el principal, es la vinculación con el sector empleador. Actualmente, ya hay 10 personas trabajando y residiendo en Cancún.
Alicia Ramírez aclaró que para vincular a un migrante con un empleo, primero se debe garantizar sus derechos laborales, ya que a partir de esa consigna los migrantes pueden mejorar su calidad de vida.
“Tratamos de que accedan a trabajos donde les garanticen sus derechos laborales, donde no sufran ningún tipo de trata ni abuso laboral. Que tengan la capacidad de poder salir adelante, y que vean a Cancún como un lugar de acogida y no de tránsito”, subrayó.
“Aquí hay una gran oferta laboral, por lo que ,si se logra el desempeño de estas personas, podrán cumplir con sus necesidades, las suyas y las de sus familiares”, agregó.
Hasta ahora se han recibido 352 migrantes en este centro, a los que han apoyado en su estatus migratorio, asesorías, trámites, documentación entre otros. La directora de esta institución señaló que la mayoría de los migrantes proviene de Colombia, Venezuela, Guatemala, Cuba y Honduras. Aunque también hay casos de rusos, haitianos y de ucranianos.