Ante el argumento de que hay huéspedes y es necesario atenderlos, trabajadores turísticos de Cancún denuncian que están siendo forzados a quedarse en los hoteles donde laboran pese a la llegada del huracán “Beryl”.
Señalan que algunos directivos hoteleros toman decisiones de manera unilateral, sin considerar que estas personas pueden estar en riesgo, o que incluso tienen familias a las que no podrán apoyar durante el paso del fenómeno meteorológico por Quintana Roo.
Pero así como hay trabajadores de cocina, restaurantes, áreas públicas, camaristas y demás que están siendo forzados a quedarse, hay otra parte que debe estar laborando y tendrá que buscar una alternativa para llegar a su vivienda al salir porque no se sabe si habrá transporte público hacia todas las zonas de Cancún.
En redes sociales hay quejas de muchos tipos. Por ejemplo, una mujer denuncia de manera anónima: “Mi hijo trabaja en tercer turno y los de su hotel los obligan a ir”
Otra persona dice que no es correcto que hagan a la gente ir a trabajar, salir tarde y arriesgarse a no encontrar transporte de vuelta a su hogar, pues para esa hora ya se sentirán los efectos del huracán “Beryl”.
“¿Por qué no han dado la orden de cerrar comercios y demás trabajos individuales? Mucha gente no tendrá como trasladarse si empiezan las lluvias, hay quienes tiene turno de tarde y no han cancelado su horario, muchos salen a las 9:00 de la noche, pero hay gente que no tiene cómo moverse y los servicios de taxi se ponen sus moños para no llevar a la gente”, denunció una ciudadana.
Otro empleado, quien ni siquiera es de la industria hotelera, considera que es ridículo poner a la gente a hacer guardias, pero que al final las personas acatan la orden por temor a ser despedidas.
“Hacer guardias es una tontería, yo trabajo en una empresa de electrodomésticos, ni siquiera hotel y aun así, hacen guardias para trabajar de noche. Debería haber suspensión de labores hasta en el sector privado para que se resguarden en sus viviendas y prepararnos para el huracán sin temor a ser despedidos”, lamentó.
Incluso no faltó quien acusara doble moral pues se aprobó la Ley Seca que comenzó desde el primer minuto de este jueves, pero no se suspendieron actividades y se está obligando a los empleados a acudir a sus centros de trabajo.
En resumen, hay quienes creen que los empleadores prefieren ver por sus negocios y centros de trabajo que por el bienestar de las personas ante el arribo de un fenómeno hidrometeorológico como el huracán “Beryl”, que impactará en las próximas horas en la zona centro de Quintana Roo.