Cancún.- Pese a que la venta de atrapasueños y cortinas artesanales se ha vuelto frecuente en todo el estado, estos productos no son tan comprados en Cancún y Playa del Carmen, donde hasta la fecha son poco valorados por los locales y los turistas que arriban a estos destinos turísticos.
De acuerdo con la productora artesana, Laura Vanessa Flores, esto contrasta severamente con lo que ocurre en otros puntos del estado, como la zona maya y Tulum, donde estos productos son muy cotizados, quizá por el tipo de turista que visita estas regiones de Quintana Roo.

En entrevista, la productora señaló que en estas zonas se pueden encontrar decenas de vendedores, sobre todo en las carreteras, donde dichos productos hechos a mano son vendidos a precio muy bajo.
Por ello, Venessa Flores recalcó lo difícil que es vender en Cancún dichos productos, los cuales en su mayoría son comprados por turistas, ya que el habitante local se muestra prácticamente desinteresado, a diferencia de lo que ocurre en otros sitios de la zona maya, como José María y Morelos, donde los habitantes de este municipio son las máximos compradores.

Por otro lado, la artesana refirió que dichos productos, además de que pueden fungir como souvenirs, son artículos funcionales, sobre las cortinas hechas a mano, las cuales pueden ser usadas para salas y cabeceras de cama.
Detalló que cuenta con cortinas con todo tipo de precios, que van desde los mil 600 hasta los mil pesos, así como atrapasueños de cualquier color con costos igualmente variables, entre los 500 y 300 pesos.
Al respecto de su precio, Vannesa Flores dijo desear que estos productos sean cada vez más valorados por las personas, ya que para su culminación hay un proceso minucioso de elaboración que dura hasta tres días y medio.