Cozumel.- Las deficiencias en equipo y en las instalaciones, sumados a presuntos malos tratos, mantienen inconforme a los trabajadores del Rastro Municipal, que la semana pasada decidieron parar labores, para obligar a que atendieran sus exigencias.
Francisco Basto Pool, secretario de acción política del Sindicato del Ayuntamiento de Cozumel, confirmó que la situación llegó a su punto álgido al averiarse la grúa con la que alzan a los cerdos, por lo que esta labor ahora toca hacerla manualmente a los 12 trabajadores del rastro.
Sin embargo, el representante sindical aclaró que este es un tema añejo y recurrente, porque aunque reparan algún equipo, siempre termina averiándose de nuevo, pues ya es obsoleto y está en mal estado.
El sindicato dialogó con Karla Salazar, subdirectora de Desarrollo Económico, quien se comprometió en conseguir la pieza faltante. El viernes pasado ya reabrió el rastro, dando muerte a 50 cerdos, aseveró Basto Pool.
Las labores continúan, pero necesitan resolver estas deficiencias, pues el rastro ha sido descuidado en las administraciones pasadas, “y la actual no es la excepción”.
El secretario también confirmó que hay quejas del personal en contra de la administradora del Rastro, Martha Canché, por supuesto maltrato, “pero hay que hablar con ella para ver cuál es la situación”.
