Cozumel.- A casi un año de la asamblea extraordinaria, en la que Deyanira Jiménez de la Cruz, fue destituida como secretaria general del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del H. Ayuntamiento de Cozumel y expulsada de este organismo, el proceso de elección de nuevo dirigente sigue congelado.
En entrevista, Jiménez de la Cruz comentó que “todo está en ‘stand by’, todo sigue igual desde hace un año”, cuando un grupo de trabajadores del sindicato le impidieron la entrada a las oficinas donde opera el gremio, para apoderarse de la documentación.
“Me dejaron sin sustento para hacer las cosas como debieron de haber sido. Desde enero ya debimos de haber hecho las asambleas,”, explicó.
La exlideresa sindical explicó que no ha salido la convocatoria, porque el presidente de Comisión de Justica y Vigilancia, Francisco Abraham Díaz Gamboa, también fue destituido el mes pasado mediante una asamblea.
“A mí, como secretaria general, no me respetan desde hace un año, ellos quisieron tomar así el cargo, no es desde ahora que lo estaban intentando, es desde hace tres años”, explicó.
Debido a que el 27 de abril vence su periodo al frente del sindicato de los trabajadores del Ayuntamiento, explicó que realizarán una asamblea la próxima semana para saber qué deciden los agremiados.
En caso de ser elegida nuevamente para el cargo, Deyanira Jiménez comentó que no se tomarán represalias en contra de los trabajadores disidentes.
“No soy una líder de venganza, el día que me vinieron a golpear en horario de trabajo, podría haber actuado bajo la ley”, comentó.
Por último, indicó que este grupo de trabajadores, al entrar a las oficinas del gremio se apoderaron de documentación importante, como títulos de propiedad de terrenos pertenecientes al sindicato, de los cuales, dice, están haciendo mal uso.
