José María Morelos.- Ejidatarios de Kancabchen se dicen preocupados por la escasez de granos de maíz por parte de Seguridad Alimenticia Mexicana (Segalmex), la que ha comenzado a racionar las porciones que otorgan a las familias de este núcleo ejidal.
Así lo indicó Julio Cesar Cab Gómez, comisariado ejidal de este lugar, quien señaló que las familias están recibiendo sólo 20 kilos de maíz y hay ocasiones en el que el carro de Segalmex no llega a abastecerlos.
Comentó que, ante este panorama, consideran importante retomar la siembra de maíz criollo para el autoconsumo, ya que los productores se han enfocado a la citricultura, descuidando la cosecha de esta semilla.
Precisó que debido al alza del precio del limón cuando es temporada de sequía, los ejidatarios prefieren utilizar sus tierras para cultivar este cítrico, que llega a venderse hasta en 800 pesos la caja en esa temporada, sin embargo, en época de lluvia baja hasta los 70 pesos, es por eso que “la gente lo ve más rentable que el maíz”.
“Pero el maíz también está teniendo un buen precio porque es de consumo vital de nuestro pueblo, nos preocupamos porque no todos están produciendo maíz”, expresó.
El comisariado ejidal señaló que con el apoyo de fertilizantes por parte del gobierno federal cada uno de los productores podría destinar una parte de sus tierras a la siembra de maíz criollo para garantizar el consumo.
BONOS DE CARBONO
En otro tema, Cab Gómez indicó que el ejido destinará una superficie de cuatro mil 300 hectáreas y otra de dos mil 500 hectáreas para conservación, para así recibir dinero a través de bonos de carbono.
Esto es además de la conservación de 70 hectáreas de selvas forestales donde se protegen especies de árboles medicinales como el copalchi, cuya corteza es utilizada para curar enfermedades estomacales.
Explicó que, en las hectáreas destinadas para los bonos de carbono es muy importante hacer las brechas cortafuegos de cuatro metros, cuando es la temporada de sequía, así como realizar vigilancia permanente.
Comentó que en el ejido tienen permisos de aprovechamiento forestal y anualmente les dan un área específica para poder aprovecharla, la cual se delimita y se marcan los árboles que se pueden aprovechar.
